El chartismo consiste en el estudio de gráficos en base a tendencias y ruptura de las mismas, utilizando líneas de tendencia y figuras geométricas. La diferencia con respecto al análisis técnico es que éste ultimo sólo se basa en el análisis de datos en base a fórmulas matemáticas para analizar el comportamiento futuro de los precios según las series de datos.
El chartismo o análisis de gráficos tiene tres pilares sobre los que se asienta:
1. Los precios se mueven en base a tendencias
2. En la cotización se reflejan siempre todos los factores que pueden afectar a una empresa, índice, materia prima, etc
3. Los comportamientos de las cotizaciones son repetitivos, de forma análoga en el tiempo, en base a ciclos.
Por tanto, aquel que siga estas premisas nunca tiene que dejarse influir por factores externos a los puramente estadísticos, que son los que se muestran en los gráficos. La previsión de mejores beneficios para una empresa, nuevas inversiones con alto riesgo, etc, son factores que se tienen que detectar –dicen los chartistas – en base a cotizaciones, no por el conocimiento externo. Por ejemplo, la aparición de una buena noticia en un mercado de valores supondría un alza en las cotizaciones, pero este alza debe de estar implícita, y por tanto prevista, en los gráficos que analicemos.
Podemos analizar con los mismos criterios, cualquier tipo de valor o mercado internacional, porque los parámetros que utilizaremos para valorar el análisis chartista serán los mismos. Así, con los mismos conocimientos podremos establecer la proyección para los futuros del crudo como el desarrollo de la cotización de un valor estrella de la bolsa de Londres.
Desde luego, también podemos llegar a una interpretación errónea de las premisas de las que partimos, fallos en el comportamiento de los precios, señales falsas en los gráficos, etc, que pueden producir el efecto contrario al esperado. Por tanto, tendremos que saber reconocer los errores, los cambios inesperados, y no mantenernos en la misma postura esperando el cambio
que nos de la razón.
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